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martes, 31 de marzo de 2015

De blog a blog: El Dibujante 2.0




"El Dibujante 2.0" (en receso) ha sido uno de los blog de arte más interesante de habla hispana. El español Juan Muro es su creador y promete volver a editar esas notas tan interesantes a lo que nos tenía acostumbrado: "Lo sigo manteniendo abierto -expresa- pero cada día tengo mayor intención de completarlo con una sección de escultura"Actualmente embarcado en un gran proyecto escultórico, se tomó un tiempo para dialogar sobre el arte, el mercado y la importancia de la formación artística.


"Todo este proceso de arte es un permanente diálogo entre la piedra y el autor. Durante el trabajo creativo la obra es solo un esbozo, una idea sin concretar. Pero cuando se acaba, el autor deja de tener importancia, incluso la aventura que ha sido el proceso tampoco importa, la obra es todo lo que queda y debe transmitir sola, sin necesidad de explicaciones, el mensaje que el autor quiso contar a través de ella".

Por Rubén Reveco, Licenciado en Artes Plásticas


-¿Es Juan Muro un escultor? 
-Yo soy artista, sí. Pero ni me gusta hablar de mi ni de mi currículum. De hecho nunca firmo mis obras
-¿Y quieres hablar de "El dibujante"
Sí, excelente, no me importa hablar de mi arte, pero lo importante no soy yo, es el arte.
-El anonimato premeditado es una actitud de riesgo en un mundo tan personalista. Me recuerda cuando Miguel Angel debió cincelar su nombre en La Piedad porque especulaban quién podía ser el autor...
-Cierto, pero yo tengo mucha suerte. Nunca hago exposiciones, lo vendo todo desde mi taller. No quiero ser conocido, mis cuadros llevan claves anotadas por si hay plagio, pero nunca lo ha habido.
-No tienes suerte pero vendes ¿cómo se explica esa aparente contradicción?
Si, sí, tengo mucha suerte. Aunque disfrazada de mucho trabajo. Pero el mercado nunca tuvo nada que ver con el arte, y ahora lo que hace es corromperlo.
-¿Alguien duda que el arte está en manos de los mercaderes?
Sí, amigo, eso sucede de continuo. El artista se ve obligado a vender, y el mercado quiere obras que le sirvan de billetes, de moneda de cambio.
Ello obliga al artista a dedicarse a otra cosa que no sea el arte para poder mantenerse y poder ser independiente en buena medida.
-¿Un artista que renuncie a ser artista para zafar de los especuladores? ¿Entendí bien?
No, no tienes que renunciar a ser artista, solo es que no se puede vivir del arte sin estar sometido a los especuladores. Así que mejor no vivir del arte y seguir haciéndolo. Bueno, cada cual tiene su fórmula. Esta es una que a mi me va bien. El mercado del arte, aún está sumido en una enorme burbuja, que explotará pronto, pero los artistas, lejos de ella, han reaccionado.
-¿La docencia puede ser una buena alternativa para un artista, por ejemplo?
En efecto, aunque hay otras, la docencia es la mayor salida que tiene el artista actual.
-Tu hacías excelente docencia en El Dibujante, sin embargo...
Sí, cierto. Creo que en España, y en general en el mundo latino, no nos han enseñado la historia del arte como debe hacerse, que es asociada al maestro, o al momento de la obra. Por eso inicié elDibujante, que tengo intención de ampliar a la escultura y luego a otras artes.
-Sin embargo, hay muchos pintores jóvenes que se quejan de sus profesores en las facultades de arte. Que no les enseñan a dibujar y que están más preocupados de las instalaciones, arte conceptual y todas las variantes del llamado arte contemporáneo...
Sí, las facultades de Bellas Artes se interesan más por el 'arte' contemporáneo que por el clásico, y ello hace que el artista pierda oficio. Por ejemplo hoy casi es imposible encontrar escultores que se dediquen a la talla de mármol de tamaño natural, y a los pintores la proliferación de diferentes tipos de pigmentos excelentemente preparados hace que olviden la manera de hacerlo ellos mismo o de preparar los lienzos, por poner solo dos ejemplos.
-Bien, el artista artesano, como en la Edad Media o en el Renacimiento.
-Pero el arte conceptual y el abstracto ha muerto. Desde la última gran obra de este tipo de arte, la bóveda del edificio de Naciones Unidas en Ginebra, del español Miquel Barceló, y su consecuente escándalo ya nadie se  atreve a pintar abstracto.
-¿Qué pasó?
Pues que cobró un dineral por una mierda y la gente se escandalizó. Los artistas ya estábamos hartos. 
-¿No más vanguardias?
En las vanguardias postexpresionistas, se producen tres condiciones que influyen mucho en nuestro oficio:
La primera es que se rompe el diálogo entre el artista y el espectador. Nadie entiende la obra, que hay que explicar, y surge el debate de ¿Qué es arte?
La segunda es que acceden a la vanguardia autores que no tienen una mínima formación, es el "éso lo pinta mi hija pequeña!".
-¿Y tercera?
Ante la falta de criterios claros, el mercado del arte se deforma y autores y obras comienzan a valorarse por cuestiones foráneas al propio arte, de manera que se forma una burbuja financiera en la que nadie entiende nada.
Pero ahora el neorealismo pictórico vuelve a tomar la vanguardia del arte desde Florencia y Nueva York. Con autores que venden por encima del millón de euros o dólares, como Roberto Ferri o Jacob Collins.
El neorealismo trae nuevos planteamientos: Nada de hacer imágenes mono focales, no se puede copiar ni calcar de fotos. Hay que pintar como nos enseñaron los maestros clásicos (aunque sin sus artilugios ópticos y avanzar en la estética.
-¿Crees que gracias a los nuevos medios de comunicación (Internet, redes sociales, blogs) se empieza a escuchar la voz de los que no tienen voz?
Entre los artistas sí se les escucha a los que no tienen voz, pero hay otra parte del mundo del arte que no quiere oír este mensaje porque hay muchos intereses económicos creados.
-¿Será que los pintores realistas se demoran mucho en resolver sus trabajos y el mercado necesita cantidad y no calidad?
El buen artista no debe hacer muchas obras. No puede. Solo son buenas muy pocas de las obras del mejor artista. El artista no puede ni debe pensar siquiera en el mercado a la hora de hacer su arte.
El artista debe hacer muy buenas obras, no muy numerosas. Ya lo decía Leonardo cuando lo de "L'arte ch'e cosa mentale". Cuentan que Fidias llegó a realizar cinco grandes obras maestras del arte universal, pero de ellas solo conservamos referencias míticas. Nadie, ni Miguel Angel, consiguió luego tanto.

Tallando el mármol





sábado, 28 de marzo de 2015

¡Ataque nudista!

"Urbanudismo" en el Día de la Mujer.


¡Éxito garantizado! El desnudo ha sido desde la Prehistoria un tema recurrente en el arte, pero hoy ha logrado un resurgimiento inesperado de la mano de audaces puestas en escenas de artistas que no son artistas o de vedette que quieren ser artistas o de artistas que quieren ser vedette. No sé, no lo tengo muy claro.
El asunto es que -30 mil años después de la Venus de Willendorf- no nos sorprendamos si por las callecitas de Buenos Aires nos encontramos con un par de chicas totalmente desnudas. Pongamos atención, no miremos para otro lado, porque ellas nos quieren decir "algo".
En esta oportunidad he traído la obra y el testimonio de una modelo (Paula Brindisi), una vedette (Andrea Ghidone) y una de las mayores referentes de la performance (Vanessa Beecroft). ¿Cuál es la diferencia entre una y otra?


Caminando desnudas por las calles del barrio. Están reuniendo voluntarios a través de Facebook para otra muestra de "urbanudismo".


1) Desnudas, en pleno barrio de Boedo, montaron una performance de "urbanudismo": un proyecto fotográfico que nació en Barcelona (España) en 2004 y que busca exponer las reacciones que genera en las personas ver a otras realizando acciones de todos los días, pero sin ropa. Tomar un taxi, salir de compras, sentarse a tomar un café, leer el diario...
En Buenos Aires, la productora fotográfica Paula Brindisi está detrás de este proyecto. Ahora su nuevo desafío es convocar a personas que se animen a posar desnudas y realizar una foto masiva... claro, antes de que lleguen los primeros fríos.
La idea es realizar una intervención urbana similar a las que ya hizo el famoso fotógrafo norteamericano Spencer Tunick (www.spencertunick.com), quien ha logrado reunir a miles de personas en diferentes ciudades del mundo para llevar a cabo sus instalaciones. En Buenos Aires, casi 500 personas se juntaron en la 9 de Julio para posar desnudas, recostadas, entre Avenida de Mayo y el Obelisco. Fue en abril de 2002.


Con su trabajo Paula Brindisi genera reacciones muy diversas: "En la performance que hicimos el Día de la Mujer en Boedo la gente estuvo super receptiva y no se generó ningún tipo de polémica. En otras intervenciones, en cambio, sí vivimos situaciones de violencia, con gente alcoholizada, amenazando o gritando. Y otra vez, en 2005, nos desnudamos tres hombres y yo, fuimos a San Telmo y nos llevaron presos por exhibición obscena. Si bien fuimos sobreseídos, el proceso duró un año. Finalmente se demostró que se trata de un proyecto artístico", explicó.
"No hacemos nudismo, no vamos a playas nudistas, no tiene que ver con ese movimiento, que respetamos. Lo que hacemos tiene que ver con derribar prejuicios. Y además generamos un registro fotográfico de la intervención. En general la gente hace muchas preguntas, se lo toman bien; algunos aplauden. Lo importante es que la intervención los movilice", explica Paula.
Más info en las cuentas de Facebook Paula Brindisi Fotografía y en Urbanudismo - Desnudarte. Y también en el blog www.urbanudismo.blogspot.com.ar.




"Lo que hago yo se opone a la exhibición del cuerpo de la mujer con fines morbosos, en definitiva comerciales. Dejemos de lado la hipocresía", expresa la modelo.

“El desnudo es más que un piquete”

Paula Brindisi. Protagoniza intervenciones sorpresivas en las que se pasea sin ropa. “Estoy a favor de anular la mirada perversa”, dice.
-¿Qué significa cruzarse una mujer desnuda?
-Es un símbolo de libertad y alegría. Igual, mi proyecto pone en juego personas de ambos sexos. Es cuestionarse sobre el propio pudor y la ridiculez de estar vestidos.
-¿Para qué sirve desnudarse en la calle una o dos veces por mes?
-UrbaNudismo-desnudArte es un proyecto fotográfico itinerante. No es una o dos veces al mes, sino que son intervenciones sorpresivas que ni yo sé cuándo se dan. Podemos protestar desnudas porque, precisamente, el morbo y el voyeurismo convocan y llaman la atención. Desnudarse es más efectivo que un piquete. Podemos convocar a grupos que se animen a desnudarse pacíficamente para protestar. Por otra parte es hacer realidad el típico sueño de salir desnudos a la calle y cuestionarse qué sucede con todo eso. Sirve para plasmarlo en fotografías y en arte multimedial, con el fin de imprimir un libro. La idea básica del Urbanudismo es la de poder romper con el concepto policial y religioso de que el cuerpo de la mujer es una fuente inagotable de pecados, y que cuánto menos ropa se tiene se va convirtiendo en una exhibición cada vez más obscena hasta llegar a una suerte de “indecencia” insólita.
-¿Dices que sigue llamando la atención el famoso “desnudo artístico”?
-Definitivamente sí. El cuerpo es bello, estético, llamativo, da curiosidad al espectador.
-¿Cómo podrías hacer para vivir desnudándote un poquito cada día?
-No entiendo la pregunta. Mi proyecto no apunta a algo erótico ni tiene intenciones de calentar a la gente. Es más bien un proyecto sociológico. ¿Te sirve igual para la nota?
-¡Totalmente! Sólo me interesaba saber si podrías vivir de esto.
-No vivo de esto. Soy modelo de desnudos para diferentes artistas como Arturo Aguiar y Edgardo Delfino, y trabajo como productora general para el fotógrafo Alejandro Ferrer. Yo soy de las que todavía no entiende por qué no se puede hacer topless en una playa argentina sin que venga un guardavidas, un concesionario de playa o alguna vieja mojigata a retarnos. ¿Mostrar los pechos con los que amamantamos es obsceno? ¿Una malla “hilo dental” que muestra las nalgas y el monte de venus es aceptable y la desnudez no?
¿Contra qué protestas?
-Contra nada. Es a favor de quitarse prejuicios y anular la mirada perversa sobre el cuerpo desnudo. No asociar el desnudo con lo sensual. También para que se pueda realizar el sueño que tenemos todos de salir a la calle desnudos y para que vivamos una experiencia única de libertad en su máxima expresión.
-¿Es lógico pensar que las feministas de suplementos como “Las 12” te desprecien o algo así?
-Para mí el proyecto no tiene como objetivo agradar, por ende eso queda al criterio de cada uno.
-¿Pero el feminismo banca o muerde?
-Las feministas aún no se hicieron escuchar con respecto a UrbaNudismo.
-En tus performances, ¿el criollo promedio te confunde con una “puta” o con una “loca”?
-Con eso y mucho más... Hay preguntas que no entiendo bien dónde apuntan.
-Imaginas que soy el inconsciente colectivo. ¿Qué pasa cuando te reconocen vestida?
-Me preguntan de todo, me retan, me aconsejan, me felicitan y algunos me dicen que quieren participar de un desnudo masivo... La verdad es que me miran como si fuese un extraterrestre, una amenaza a la sociedad, un monstruo.
-¿Y qué eres?
-Soy nada más que una mujer práctica y resolutiva que va al frente.
-¿Si no estuvieras así de buena te animarías a mostrarte?
-Siempre y cuando me sienta cómoda, no me importa cómo me encuentre físicamente. No busco cuerpos bonitos, busco mostrar los cuerpos tal cual son y la variedad de estilos... En realidad pongo en juego historietas que leí de Milo Manara en mi adolescencia.
-¡Milo Manara!: “El Click”, “El perfume de lo invisible”. Ese fue mi porno temprano.
-Prefiero "El camino oculto": una mujer que sólo puede vivir si logra representar sus obras por distintos lugares, algunos urbanos.


(FUENTE: Diario Clarín)

Ghidone y Bernal se desnudaron para expresar una filosofía de vida .

Desnudos por aquí, desnudos por allá

2) Por su parte, "Mi cuerpo dice" es la que campaña que impulsa Andrea Ghidone, la vedette convenció a su amiga bailarina de realizar la sensual producción de fotos.
Con una producción de fotos muy sensual, Andrea Ghidone busca transmitir sus creencias y filosofía de vida. Bajo el lema #Micuerpodice, la vedette cautivó a sus seguidores en redes sociales con las provocativas imágenes, en las que posó desnuda acompañada por la bailarina Gisela Bernal.
La iniciativa de Ghidone se basa en plasmar en su cuerpo desnudo los ideales que profesa. "No hay camino para la paz, la paz es el camino. El fin de amar es sentirse más vivo", fue una de las oraciones que junto a Bernal eligió para grabar sobre su piel.
"Las dificultades preparan a las personas comunes para destinos extraordinarios", se puede leer en otra de las fotos.





Texto de 


3) "Mi trabajo está tan próximo a la pintura como a la escultura clásica. Mis obras son pinturas que se desarrollan lentamente en el tiempo. Sus referencias, cuando están presentes, son casi siempre de la pintura. Pero el hecho de que no me sirva de ella es irrelevante." Esa afirmación de Beecroft nos pone delante de otras dos cuestiones fundamentales para entender su trabajo. La primera es la que tiene que ver con la continuidad que sus mujeres desnudas establecen con la historia del arte. Así, en su obra se pueden rastrear modelos que tienen que ver con las representaciones de Eva, Venus o Magdalena salidos de los pinceles de Filipo Lippi, Botticelli, Velázquez, Manet, por citar algunos de ellos, además de otros más vinculados al arte contemporáneo.


¿Cualquiera puede hacer una performance?

Hay una cierta similitud incómoda que aparece en algunas obras de performance y sólo podría explicarse desde la carencia de agudeza creadora al plantear las ideas.
La performance o arte de acción, ha sido uno de los lenguajes plásticos en el mundo del arte más polemizado, controvertido, explorado y criticado, tanto por su carácter multidisciplinar en el cual uno de sus propósitos es romper barreras, como por su desgarradora inclusión del cuerpo como soporte (En el arte de acción el cuerpo no siempre es el soporte, también puede actuar como vehículo). En ocasiones como medio artístico, pareciera que lo menos importante para quienes hacemos uso de este lenguaje son los criterios plásticos que se deben tener en cuenta al momento de hacer una obra, aun siendo una performance. No me refiero, advierto, al mensaje que éste quiere comunicar, hablo aquí de los elementos formales y técnicos que éste lenguaje ha de proponer, y si usted como performer tiene esa conciencia y lo hace.
Debo confesar que me encuentro un tanto alterada al notar lo que sucede en algunas performances que observo, me preocupa, sobre todo, porque veo que contienen tantas correspondencias formales unas con otras, tantas reincidencias en gestos, materiales, planteamientos y discursos tan repetidos excesivamente ad nuaseam que he propuesto yo (Mea culpa) y que han cometido los otros, que estos gestos, vestuarios, temas y formas de desarrollar el arte de acción se están convirtiendo cada vez en una manera fácil de justificar nuestra injustificable malsana y ya vívida mediocridad creativa. Lo que presentan y re presentan muchos artistas de performance es elemental y sin profundidad. Me preocupa sobre todo porque yo misma he cometido estos errores y reconocerlo sí que cuesta. Ya lo advirtió Avelina Lesper, “La repetición sistemática no es entendimiento, no hay asimilación ni uso de la imaginación, es simple reacción de corto plazo, superficial, desechable. Inevitablemente se convierte en un cliché, en la pose del que hace y no piensa.”
Quiero creer, a pesar de las palabras de Lesper, que hacer performance no se limita a una pose superflua y vana.



¡Otra vez desnudos!

El desnudo es la manera más básica de concebir una performance. Desde los más corrientes performances feministas, hasta la sofisticación impecable que propone Vanessa Beecroft, el desnudo, es uno de esos malsanos clichés a la hora de pensar en una acción performática. Generalmente su objetivo principal es el espectáculo. Este comentario no tiene, advierto, juicio de moral ramplona alguno, lo que molesta aquí no es el desnudo como tal, sino la ligereza y la inmediatez  con la que se utiliza este recurso por el simple hecho de saber que va a causar revuelo, le van a prestar un poquito más de atención a su trabajo o le sacarán alguna nota mal escrita en algún periódico local.
El desnudo sin duda sigue siendo un gesto tan poderoso, que hasta el maestro Ai Weiwei a quien tengo mucha admiración y respeto no dudó en hacerlo en algún momento. En efecto, el desnudo por supuesto que puede ser utilizado en la performance y de hecho, hay acciones que necesitan puntualmente de él, y como ejemplo destaco la acción de Ulay y Marina Abramovic “Imponderabilia”, donde los espectadores debían pasar en medio de los dos artistas desnudos para poder acceder a otra sala; la acción ha sido recreada en varias ocasiones incluso por la performer colombiana María José Arjona en el MOMA durante el año 2010.
Sin embargo, por norma general, desnudarse sólo pretende ocultar a través del escándalo el tremendo vacío conceptual y formal que un trabajo posee. Nos toca trascender entonces la re-significación del cuerpo y dejar de hacerlo de una manera tan simplista y vana.


Conclusión

Está demás decir que estas chicas caminando deshinibidas por las calles de la ciudad, a un viejo pintor de desnudos lo hacen sentir más viejo aún.


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domingo, 22 de marzo de 2015

Juan Medina: Sobre mujeres y pintura



El reconocido pintor mexicano se refirió a su arte, y a las musas que representa, en una entrevista exclusiva con Cultura Los Andes. “Lo que pinto es el tipo de belleza que me gusta, pero sobre todo es el estereotipo de belleza que les gusta a las mujeres de nuestra época”, sostiene el artista.


Por Camila Reveco - Diario Los Andes. Mendoza, Argentina.

El arte figurativo del siglo XXI hereda la poderosa impronta de la tradición y la de los grandes maestros, lo que implica un verdadero desafío para los artistas contemporáneos que pretendan seguir reivindicando este estilo. 
El pintor mexicano Juan Medina (1950) se siente atraído por el neoclacisismo del siglo XIX -viendo su trabajo se observa que admira a clásicos como Jean-Auguste-Dominique Ingres- y sale airoso del desafío. 
Este en un artista que recrea un universo -a veces imaginario, a veces gótico- pero siempre atravesado por los desafíos del dibujo y el oficio del buen artesano y del buen pintor; representando siempre a mujeres hermosas. 
-¿Se lo ha criticado por representar a los estereotipos de belleza? 
-Claro que sí pero rara vez fueron críticas hechas por mujeres quienes, como dicen los franceses estuvieran bien dentro de su piel



-¿Dentro de qué estilo encuadra su obra?
-No me agrada la idea de “encuadrar” mi obra en un estilo determinado. Creo que si se busca una palabra sería “obra figurativa”. Algunas personas consideran mi trabajo como surrealista, hiperrealista o realista. Tal vez es un poco de todo esto, pero sin la intención de serlo.
-Estudió en México, Estados Unidos y Francia. ¿Qué rescata de la educación artística recibida?
-Mi formación es básicamente autodidacta; visitando museos y leyendo muchos libros. He coleccionado más de mil libros -solo de arte- en los últimos años. También he tomado cursos en todas las escuelas donde he tenido oportunidad: la escuela del Louvre y la de Bellas Artes en Paris, el Art Students League en Nueva York y muchos otros. Mi búsqueda ha sido principalmente de conocimientos de técnicas tanto antiguas como actuales.
Creo que saber “el oficio” es lo más importante en esta actividad. Es el lenguaje con el que después se dice -o no- una historia.


-¿Cuál le parece que es la situación del realismo en México?
-En las escuelas de arte en México se enseña principalmente arte contemporáneo, lo cual hace que muchos artistas jóvenes se inclinen por él. Los cursos de dibujo y técnica están poco presentes. En Estados Unidos hay un resurgimiento del realismo con una gran cantidad de artistas que apuestan a esta idea, además de muchas escuelas donde se puede aprender técnica
-¿Cree que forma parte de una nueva camada de pintores que siguen apostando por el oficio y al trabajo casi artesanal?
-Tengo poco tiempo de haber regresado a México y no formo parte de ningún grupo. Mi trabajo es más bien independiente; pero sí, siempre he apostado al oficio y al trabajo. Yo creo que una obra necesita tiempo para construirse. Un pintor debería poner en su obra aquello que está en su mente.
Si guía su mano por las ideas de un grupo o la opinión de la crítica, estaría solamente siguiendo una corriente o copiando las ideas de otros sin expresar la suya propia.


-¿Qué opina de los eventos de arte contemporáneo como Zona Maco de su país?
-Hasta donde sé, es una exposición organizada por galerías que se dedican a la promoción del arte contemporáneo. Es un evento entre social y cultural, con poca o ninguna cabida para la pintura realista o figurativa, que es lo que a mí me interesa.
-¿Comparte las opiniones en general de su compatriota, la crítica de arte Avelina Lésper?
-No conozco a fondo su trabajo pero creo que es una de las pocas personas que se han atrevido a decir que mucho del arte contemporáneo es un fraude. Estoy de acuerdo con ella, al menos es una opinión diferente y valiente. Sería interesante un debate entre Avelina Lésper y Teresa del Conde.
-¿Quiénes son sus mujeres, qué momento representan y qué nos quieren transmitir?
-Las mujeres de mis cuadros son modelos profesionales. Seres humanos complejos a quienes la cultura ha restringido enormemente. Mujeres intemporales con historia, sueños, retos, con la esperanza; y muchas veces el miedo, de ser libres. No me considero un pintor de desnudos. En todo caso, citando a la Sra. Lésper, “…la piel como soporte de la narrativa de la existencia”.
Mi obra no tiene un claro deseo de transmitir o expresar algo como mensaje. Cuando el cuadro está terminado, es casi siempre el espectador quien construye una historia de la obra; que por supuesto es su propia historia. Son las emociones del espectador las que están más en el juego.



-Sus modelos son jóvenes, delgadas, de pelo largo y castaño ¿es el estereotipo de belleza femenina que a usted le gusta? ¿Ha recibido críticas por representar sólo mujeres hermosas?
-El gusto por la belleza es algo que hemos aprendido y los estereotipos han cambiado a lo largo de la historia. Trato de pintar a la mujer como elemento de la especie humana en nuestro tiempo. Sí, es el tipo de belleza que me gusta, pero sobre todo, es el estereotipo de belleza que le gusta a las mujeres de nuestra época.
Me gustan las mujeres que se gustan a sí mismas, que son como ellas quieren ser y no como las demás mujeres piensan que son. Claro que he recibido críticas pero rara vez fueron críticas hechas por mujeres quienes, como dicen los franceses “estuvieran bien dentro de su piel”.


-Sus composiciones son complejas: las modelos parecen interactuar, hay siempre “movimiento” e intervienen telas…
-Algunas de mis composiciones son complejas pero otras son bastante simples. Creo que un cuadro es un universo cerrado donde cada elemento esta puesto al servicio de una imagen inventada, con los detalles y la atmósfera particular que corresponde a la sensación precisa que quiero despertar. 
-¿Suele hablar con sus modelos sobre cómo va a ser la composición?
-Sí, en muchas ocasiones platico algunas ideas con mis modelos y ellas empiezan a posar de alguna manera. Cuando encuentro una pose que corresponde a la idea que estoy buscando, le pido que se detenga y se inicia el trabajo.
A veces eligen una tela para cubrirse, a veces la elijo yo. Lo que me interesa es la mujer interactuando en nuestra cultura y la ropa es parte de ella.
Las telas antiguas o modernas son solo un símbolo de intemporalidad.


-¿La reminiscencia clásica siempre acompañó su obra? ¿Qué le causa admiración de los grandes maestros?
-No, no siempre, solo a veces, cuando confronto la imagen de la mujer de hoy con una del pasado. Con frecuencia vemos que las ideas no han cambiado tanto como creíamos o como quisiéramos que hubieran cambiado. Hay muchas cosas que me causan admiración de los grandes maestros, pero sobre todo, su capacidad para hacer evolucionar la pintura un poco más cada vez.
-Primero se inclinó por la acuarela, luego por el óleo. ¿Qué significó el cambio de técnica?
-Trabaje varios años haciendo acuarela, con una temática muy diferente a lo que hago ahora. Un viaje a Europa me hizo desear pintar algo completamente diferente pero necesitaba aprender pintura al óleo pues se adaptaba mejor a lo que quería hacer. El cambio de técnica implico un cambio de ritmo al pintar. La factura en óleo da y pide tiempo de observar, reflexionar sobre lo que se pinta. Da más cuerpo y peso al resultado.


-¿Cuál es la historia de la pintura que eligió para ilustrar esta entrevista? 
-Casi siempre parto de una reflexión intelectual mezclada con mis experiencias. Mis pinturas intentan decir lo que las palabras no pueden, a menudo por medio de símbolos. El desnudo representa el deshacerse de restricciones morales o culturales. Las alas, la búsqueda de la libertad. Las manzanas son pasión o sabiduría, etc., etc.
La confrontación con las imágenes del pasado implican intemporalidad. Las figuras religiosas son aún más restricciones de la cultura. La mano de la modelo se construye a si misma como ella se ve. Trato de pintar lo invisible con ayuda de lo visible. Las figuras femeninas son mi primera elección no solo por razones estéticas.
Las mujeres poseen un pasado lleno de esperanzas y miedos, representan toda la fuerza y la fragilidad que un ser humano es capaz de experimentar. La historia que me pides está en esto y en lo que tú ves en ella. Se llama “Historia Inconclusa”, se vendió en Lovetts Gallery en Tulsa, Oklahoma. No conozco el nombre del comprador.


El artista.

Juan Medina

Edad: 64 años
Fecha de Nac.: 19 de setiembre, 1950
Vive en: Cuernavaca, Mor., México
Estudios formales: ninguno

Reconocimientos: 
2014 - Medalla de plata Salón de la Société Nationale des Beaux Arts (Paris) 2013 - Finalista del Art Renewal Center 2013 International Salon. 2012 - ARC™ Approved Living Master/ Finalista del Art Renewal Center 2012 International Salon. 2011 - American Art Collector Editor's Choice Award of Excellence International Guild of Realism 2011 Show (Santa Fe, NM) Artist's Choice Award  International Guild of Realism 2011 Show (Santa Fe, NM) Premio Charles Cottet Salon de la Société Nationale des Beaux Arts (Paris), entre muchos otros.

Gustos
Un libro: “Tierra de hombres” (Saint-Exupèry)
Un grupo de música o solista: Edith Piaf
Una canción: Aria “Un bel di vedremo” Madame Butterfly
Una película: “Casablanca”
Un hobby: escalada en roca

Contacto
contacto@medinajuan.com
www.medinajuan.com. “No estoy en ninguna de las redes sociales”.




sábado, 21 de marzo de 2015

Los fotógrafos quieren ser artistas

Los fotógrafos Santiago Porter (tercero de izquierda a derecha) y Jorge Luis Campos (quinto) inauguraron en simultáneo en el MNBA, de Neuquén, Argentina. Una coincidencia curiosa, al menos. Los fotógrafos no sólo han copado los espacios expositivos vedados a otros, sino que lo hacen de a dos a la vez.  


El MNBA, de Neuquén, acaba de inaugurar dos muestras de fotografía. Un lenguaje expresivo que parece haber ocupado el lugar de la pintura realista y ganado el ingreso sin censura a los templos del arte contemporáneo. 
¿Qué ha sucedido?
La llegada de la fotografía en el siglo XIX y el paulatino desinterés de los artistas por lo que pasa a su alrededor ha provocado en la historia del arte esta singularidad marcada por el encuentro y desencuentro entre arte y fotografía.


Por Rubén Reveco - Licenciado en Artes Plásticas


Siempre ha estado claro: no es lo mismo una fotografía que una pintura. La primera depende de la mecánica, es el producto de una fracción de segundo y puede ser multiplicada infinitamente. La segunda -en cambio- depende de la capacidad de un artista para modelar materiales inertes, es de lenta realización hasta convertirse en un objeto único; irrepetible. 
Con esto no quiero decir que la pintura -por ser pintura- sea superior a la fotografía. ¡Nada que ver! ya que existe fotografía maravillosa y pintura horrible. 
A mediados del siglo XIX, cuando emerge la fotografía, la pintura abandona los temas típicos del romanticismo y clasicismo y nace el estilo realista. El artista preocupado por las condiciones de explotación y pobreza de sus semejantes representa esa dura realidad. Mientras tanto, la fotografía se dedica casi exclusivamente al retrato. 
Luego, los pintores impresionistas descubren el paisaje. La fotografía sigue siendo en blanco y negro y no se puede comparar con una pintura por más que se coloree. 
Durante la primera mitad del siglo XX la fotografía tiene su gran oportunidad de ser un medio expresivo importante. Es la cronista de una época convulsionada y nacen testimonios gráficos de las guerras mundiales de gran impacto en la sociedad. Sociedad que descubre en la fotografía lo que la pintura no le entrega, más preocupada de mirarse el ombligo que ver "qué pasa en el barrio". Para peor, los artistas se refugian de las bombas en el arte abstracto y el geométrico y se alejan más y más de la realidad. Las guerras generan miseria, terror y dolor pero los pintores están más preocupados de chorrear telas o hacer cuadraditos que de representar esos terribles momentos.
La fotografía hasta ese entonces no tiene pretensiones artísticas. El arte sigue siendo arte y la fotografía, fotografía. Pero cuando el relato decreta que las "artes plásticas" se llamarán "artes visuales", mete en una misma bolsa de residuo toda la basura del llamado arte contemporáneo. 
La fotografía aprovecha la oportunidad de ascender y jugar en primera división y -disimuladamente- se abre paso. Primero está en la banca esperando su oportunidad y ante el primer lesionado (pintura realista) entra a la cancha. La fotografía ayudada con las nuevas cámaras digitales y las nuevas técnicas de impresión puede hacer maravillas. Nunca más deja la titularidad.

Es por eso que en espacios como el MNBA los fotógrafos inauguran cuatro o cinco veces por año. Nada mal. La fotografía ya es arte y juega en las ligas mayores.



Fotografía de Santiago Porter.


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miércoles, 18 de marzo de 2015

Cesar Santos: clásico y contemporáneo





Aunque nació en Cuba en 1982, César Santos es un ‘ciudadano del óleo’ pues muy jovencito emigró a los Estados Unidos (en 1995 ya estaba en Miami), y allí comenzó a desarrollar sus inquietudes artísticas, pero recientemente le veíamos viviendo y trabajando en Suecia, donde ha enseñado con varios  talleres sobre la manera tradicional de dibujo y pintura en el Atelier de Estocolmo.

FUENTE: El Dibujante

Santos estudios en las artes visuales se inició en Miami en el Design and Architecture Senior High. Más tarde estudió en el Miami Dade College, seguido por New World School of the Arts, donde recibió su Título de Asociado en Artes Plásticas. Insatisfecho con el enfoque moderno de estas escuelas, salió de Miami y viajó a Italia en busca de una sólida formación en el arte de la pintura. Tras establecerse en Florencia, comenzó a estudiar en la Academia de Arte de Ángel, una academia de pintura que ya hemos recomendado en elDibujante en otras ocasiones (para quien pueda permitírsela, claro) bajo Miguel Ángel Juan, alumno de Pietro Annigoni, de quien hablábamos reciéntemente aquí. Allí se introdujo en las técnicas y métodos del Renacimiento, siglo XVIII, y los talleres franceses del siglo XIX.



Al graduarse, Santos regresó a Miami, donde construyó una carrera exitosa, pero ya digo que es un artista que no debe ubicarse en un emplazamiento fijo.  Su obra está en colecciones privadas y públicas de Europa, América Latina y América del Norte y continuamente da cursos en América y Europa.




Santos tiene una variada temática en su pintura, que aunque pueda parecer muy influenciada por los grandes maestros de la antiguedad, en realidad se nutre de la historia de ellos, y no solo de sus obras, pero también encierran sus cuadros grandes temas metafóricos sobre asuntos transcendentales que pueden incidir en las sensaciones de sus espectadores “dando a la gente espacio para pensar y experimentar la ilusión.” Así que es fácil encontrarnos ante sus “Tres Gracias“, o ante una alegoría en la que el propio pintor ataca a Picasso, o como en su último cuadro en un encuentro con Rembrandt mostrándole “El tatuaje nuevo“.


No es el espléndido virtuosismo técnico del que hace gala Santos en sus obras lo que atrae más de ellas, pues sin despreciar el oficio en el que es maestro y que nos demuestra con esos magníficos retratos y con los más recientes y vibrantes paisajes, es su temática lo que nos obliga a reflexionar sobre el significado de cada obra. Fuera de las academias como estos torsos de mujer y hombre que os mostramos, existen una amplia variedad de escenas que parecen excesivamente teatrales en las poses de los modelos porque en realidad guardan un significado que se plantea al espectador como un enigma que debe descubrir a modo de juego: ¿Qué es más clásico que pintar la vangüardia encarnada en Las Señoritas de Avigñon de Picasso?, ¿Quién puede conseguir el bienestar balseando en un jacuzzi?


















El artista